Nombres adicionales: | Hiedra del Coliseo |
Nombre científico: | Cymbalaria muralis |
Familia: | Scrophulariaceae |
Componentes tóxicos: | null |
Síntomas clínicos: | null |
Cuando se trata de plantas de interior, los dueños de mascotas deben tener mucho cuidado. Los gatos son criaturas curiosas y les encanta explorar su entorno. Desafortunadamente, muchas plantas comunes de interior pueden ser tóxicas para los gatos, causando una variedad de problemas de salud, desde malestar estomacal leve hasta daño severo a los órganos. Una planta que se encuentra frecuentemente en hogares y jardines es la hiedra de Kenilworth, también conocida como cymbalaria muralis. En este artículo, exploraremos si la hiedra de Kenilworth es tóxica para los gatos y qué pueden hacer los dueños de mascotas para mantener a sus amigos felinos a salvo.
La hiedra de Kenilworth es una planta perenne de bajo crecimiento que es nativa de Europa y Asia. A menudo se cultiva como cobertura del suelo en jardines, debido a su follaje atractivo, delicadas flores moradas y su capacidad para crecer en áreas sombreadas. Su nombre científico es cymbalaria muralis, y pertenece a la familia de las Plantagináceas. La hiedra de Kenilworth también se conoce comúnmente como linaria con hojas de hiedra o hiedra de Oxford.
La respuesta corta es sí, la hiedra de Kenilworth es tóxica para los gatos. Según la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA), la hiedra de Kenilworth está clasificada como una planta que es tóxica para los gatos. La planta contiene una variedad de compuestos que pueden ser perjudiciales para los gatos si se ingieren, incluidos los glucósidos y saponinas.
Si su gato ingiere hiedra de Kenilworth, puede exhibir una variedad de síntomas, dependiendo de la cantidad de material vegetal ingerido y del tamaño y salud del gato. Algunos síntomas comunes de toxicidad de la hiedra de Kenilworth en gatos incluyen:
Si sospecha que su gato ha ingerido hiedra de Kenilworth, es importante contactar a su veterinario de inmediato. Ellos pueden recomendarle que lleve a su gato para un examen y posiblemente algunas pruebas diagnósticas, como análisis de sangre o imágenes, para determinar la extensión del daño.
Si sorprende a su gato comiendo hiedra de Kenilworth, lo primero que debe hacer es intentar retirar la mayor parte del material vegetal de su boca, lo más posible. Tenga cuidado de no ser arañado o mordido en el proceso, ya que los gatos pueden volverse defensivos cuando se sienten amenazados o con dolor. Una vez que haya retirado el material vegetal, contacte a su veterinario de inmediato. Ellos pueden recomendarle que lleve a su gato para tratamiento.
Si su gato ya ha presentado síntomas de toxicidad por hiedra de Kenilworth, como vómitos o diarrea, no intente inducir el vómito ni darle ningún medicamento sin consultar primero a su veterinario. Algunos tratamientos que pueden ser recomendados incluyen:
La mejor manera de mantener a su gato a salvo alrededor de la hiedra de Kenilworth es simplemente evitar cultivarla en su hogar o jardín. Hay muchas otras plantas no tóxicas de las que puede elegir, como plantas araña o helechos de Boston. Si tiene hiedra de Kenilworth en su jardín, asegúrese de que su gato no tenga acceso a ella. Puede hacerlo cercando el área donde está creciendo la planta o manteniendo a su gato dentro de casa. Además, asegúrese de que cualquier material vegetal que caiga al suelo sea limpiado de inmediato, ya que los gatos pueden sentirse tentados a comerlo.
En resumen, la hiedra de Kenilworth es tóxica para los gatos y puede causar una variedad de problemas de salud si se ingiere. Si sospecha que su gato ha ingerido hiedra de Kenilworth, contacte a su veterinario de inmediato. Ellos pueden proporcionar tratamiento para ayudar a aliviar los síntomas y minimizar el daño potencial. La mejor manera de mantener a su gato a salvo es simplemente evitar cultivar hiedra de Kenilworth en su hogar o jardín y asegurarse de que su gato no tenga acceso a ella.