Nombres adicionales: | Caladium, Orejas de Elefante |
Nombre científico: | Colocasia esculenta |
Familia: | Araceae |
Componentes tóxicos: | Oxalatos de calcio insolubles |
Síntomas clínicos: | Irritación oral, ardor intenso e irritación de la boca, lengua y labios, salivación excesiva, vómitos, dificultad para tragar. |
Como dueño de un gato, es importante estar consciente de qué alimentos son seguros para tu amigo felino. Mientras que algunos alimentos humanos están bien para que los gatos los coman en pequeñas cantidades, otros pueden ser tóxicos e incluso mortales.
La malanga es un vegetal de raíz que se utiliza comúnmente en la cocina latinoamericana y caribeña. A menudo se compara con la raíz de taro y tiene una textura y sabor similares. Sin embargo, los dueños de gatos pueden preguntarse si la malanga es segura para que sus mascotas la consuman.
La malanga, también conocida como yautía o cocoyam, es una hortaliza de raíz rica en almidón que forma parte de la misma familia que la raíz de taro y la batata. Es un alimento básico en muchos países latinoamericanos y caribeños, donde se utiliza en una variedad de platos.
La malanga suele cocinarse, asarse o freírse antes de ser consumida. Tiene una textura cremosa y un sabor ligeramente nuez que a muchas personas les gusta.
Aunque la malanga no es tóxica para los gatos, es importante recordar que los gatos son carnívoros obligados. Esto significa que sus cuerpos están diseñados para consumir carne y tienen más dificultades para digerir los alimentos de origen vegetal.
Aunque unos pocos bocados de malanga probablemente no harán daño a tu gato, no se recomienda convertirla en una parte regular de su dieta. Los gatos requieren una dieta alta en proteínas para mantenerse saludables, y la malanga no proporciona eso.
Además de la malanga, hay varios otros alimentos que los dueños de gatos deben evitar dar a sus mascotas:
Las cebollas y el ajo contienen compuestos que pueden dañar los glóbulos rojos de un gato, lo que lleva a la anemia. Los síntomas de toxicidad por cebolla o ajo en gatos pueden incluir debilidad, letargo y encías pálidas.
Aunque se desconoce la sustancia tóxica en las uvas y pasas, estos alimentos pueden causar insuficiencia renal en gatos. Los síntomas pueden incluir vómitos, diarrea y letargo.
El chocolate contiene compuestos llamados metilxantinas, que pueden ser tóxicos para los gatos. Los síntomas de toxicidad por chocolate pueden incluir vómitos, diarrea, temblores y convulsiones.
El alcohol puede causar depresión del sistema nervioso central en los gatos, lo que lleva a síntomas como letargo, falta de coordinación y desorientación. En casos severos, el alcohol puede causar insuficiencia respiratoria e incluso la muerte.
Los gatos requieren una dieta alta en proteínas y baja en carbohidratos para mantenerse saludables. Una dieta demasiado alta en carbohidratos puede llevar a la obesidad, diabetes y otros problemas de salud. Además, los gatos son propensos a problemas del tracto urinario, por lo que una dieta baja en magnesio y otros minerales puede ayudar a prevenir estos problemas.
Si estás interesado en alimentar a tu gato con una dieta casera, es importante trabajar con un veterinario o un nutricionista veterinario certificado para asegurarte de que sus necesidades nutricionales estén siendo satisfechas.
Aunque la malanga no es tóxica para los gatos, no se recomienda hacer de ella una parte regular de su dieta. Los gatos requieren una dieta alta en proteínas para mantenerse saludables, y la malanga no proporciona eso. Además, hay varios otros alimentos que los dueños de gatos deben evitar dar a sus mascotas, incluyendo cebollas, ajo, uvas, pasas, chocolate y alcohol. Al alimentar a tu gato con una dieta equilibrada y evitando estos alimentos peligrosos, podrás ayudar a mantenerlo saludable y feliz.