Nombres adicionales: | Fetterbush, Maleberry |
Nombre científico: | Lyonia sp. |
Familia: | Ericaceae |
Componentes tóxicos: | Grayanotoxinas |
Síntomas clínicos: | Vómitos, diarrea, depresión, colapso cardiovascular, hipersalivación, debilidad, coma, baja presión arterial, muerte. La ingestión de unas pocas hojas puede causar problemas graves. |
El Staggerbush (Leucothoe fontanesiana) es un arbusto nativo del sureste de los Estados Unidos. Es conocido por su hermoso follaje y se utiliza a menudo en paisajismo. Sin embargo, existe preocupación entre los dueños de mascotas de que la planta pueda ser tóxica para los gatos. En este artículo, exploraremos la evidencia científica sobre la toxicidad del Staggerbush para los gatos.
El Staggerbush es un miembro de la familia Ericaceae, que incluye otras plantas como arándanos, arándanos rojos y rododendros. Es un arbusto de hoja perenne de hojas anchas que crece hasta 10 pies de altura y 8 pies de ancho. El Staggerbush se utiliza a menudo en paisajismo debido a su denso follaje, que puede ser verde, rojo o bronce.
La planta produce pequeñas flores blancas o rosadas en primavera y verano, que son seguidas por pequeñas bayas rojas en otoño. Las hojas y los tallos del Staggerbush contienen una variedad de sustancias químicas que se cree que son responsables de su potencial toxicidad.
Si un gato ingiere Staggerbush, puede desarrollar una variedad de síntomas, incluyendo:
En casos severos, la intoxicación por Staggerbush puede ser fatal. Si sospechas que tu gato ha ingerido Staggerbush, debes contactar a tu veterinario de inmediato.
Si bien hay investigaciones científicas limitadas sobre la toxicidad del Staggerbush específicamente para gatos, hay evidencia que sugiere que la planta puede ser tóxica para otros animales. Por ejemplo, un estudio publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry encontró que una planta relacionada, Kalmia angustifolia, contiene una serie de toxinas que son venenosas para ovejas y otros animales pastadores.
El estudio encontró que las hojas y los tallos de Kalmia angustifolia contienen un grupo de toxinas conocidas como grayanotoxinas, que pueden causar una variedad de síntomas, incluyendo vómitos, diarrea, debilidad y incluso muerte. Si bien el Staggerbush no contiene las mismas concentraciones de grayanotoxinas que Kalmia angustifolia, se cree que contiene compuestos químicos similares que podrían ser venenosos para los animales.
Un estudio de 2011 publicado en el Journal of Agriculture and Food Chemistry encontró que el Staggerbush contiene una serie de compuestos fenólicos, que se sabe que son tóxicos tanto para humanos como para animales. El estudio encontró que las hojas y los tallos de Staggerbush contenían altos niveles de un compuesto fenólico llamado arbutina, que puede causar náuseas, vómitos y diarrea en humanos.
Si bien no hay evidencia directa de que el Staggerbush sea tóxico para los gatos, la evidencia de estudios sobre plantas relacionadas y la presencia de compuestos tóxicos en el Staggerbush sugiere que es posible que la planta también pueda ser venenosa para los gatos.
Si sospechas que tu gato ha ingerido Staggerbush, debes contactar a tu veterinario de inmediato. Tu veterinario probablemente te preguntará sobre los síntomas que está experimentando tu gato y puede recomendar que lleves a tu gato para un examen.
Tu veterinario también puede recomendar que indiques el vómito en tu gato para eliminar cualquier material vegetal restante de su sistema digestivo. Sin embargo, nunca debes inducir el vómito en tu gato sin consultar primero con tu veterinario.
Si tu gato tiene síntomas severos, como temblores o dificultad para respirar, tu veterinario puede recomendar hospitalización para tratamiento y observación.
Si bien no hay evidencia directa de que el Staggerbush sea tóxico para los gatos, la evidencia de estudios sobre plantas relacionadas y la presencia de compuestos tóxicos en el Staggerbush sugiere que es posible que la planta también pueda ser venenosa para los gatos. Si sospechas que tu gato ha ingerido Staggerbush, debes contactar a tu veterinario de inmediato. Tu veterinario puede brindarte orientación sobre cómo tratar a tu gato y puede ayudarte a prevenir futuros incidentes de intoxicación.